El nuevo equipamiento de artroscopia permite obtener diagnósticos más precisos, simplificar el tratamiento y mejorar la recuperación de lesiones en las articulaciones. Único en la región, posiciona al Servicio de Traumatología de la institución al nivel de los mejores centros médicos del país.
La Clínica Viedma incorporó este mes un nuevo equipamiento de artroscopia, una cirugía mínimamente invasiva que consiste en la introducción, mediante pequeñas incisiones, de una cámara (artroscopio) que permite al médico especialista visualizar la articulación de manera completa a través de un monitor de video de alta definición. Este tipo de técnica quirúrgica ofrece más y mejores posibilidades de visualización y de maniobra que la cirugía abierta. Las complicaciones durante el procedimiento son mínimas y la recuperación tras una cirugía artroscópica es mejor y más rápida.
La incorporación de la Torre Artroscópica, el último modelo de la reconocida marca estadounidense Stryker Corporation, es un antes y un después para este tipo de intervenciones tanto a nivel local como regional. El Servicio de Traumatología de la Clínica Viedma realiza una amplia variedad de estudios, sin necesidad de hacer derivaciones a otros centros médicos. Con este nuevo equipamiento los procesos serán mucho más simples, las imágenes más precisas y los resultados, mejores.
“Esto se traducirá en un mejor servicio para nuestros pacientes, que en su mayoría son deportistas”, señala Fabricio Olego, jefe de Servicio de Traumatología de la institución. “La asistencia de la terapia al deporte requiere alta tecnología, y este nuevo equipamiento es parte de eso. Ahora contamos con la última y mejor tecnología de la región para diagnosticar y atender los problemas articulares derivados de la actividad física y el deporte”, destaca.
La mejora del servicio es aún más notable en patologías de columna o articulaciones más complejas, que requieren una mayor precisión y que por la cantidad de habitantes no son tan frecuentes en la Comarca Viedma-Patagones, como por ejemplo, las lesiones en la muñeca.
Esta nueva incorporación forma parte del proceso de mejora de infraestructura y renovación de equipamiento que la Clínica Viedma inició en abril de este año con la ampliación de la Unidad de Terapia Intensiva y la adquisición de nuevas camas y que, en plena pandemia, continúa con la llegada de nuevos equipamientos.
“En medicina no hay algo que te haga mejor completamente; es la suma de cada detalle. En tecnología, este equipamiento es el mejor, y en la Clínica Viedma lo incorporamos con todos sus componentes nuevos y originales, algo que no es habitual”, remarca Olego.
Además de la tecnología, que permite abordar patologías que antes eran complejas de manera más simple, en traumatología es necesario contar con profesionales bien formados y en permanente capacitación y actualización profesional, que trabajen en equipo, como es el caso de los traumatólogos de la Clínica Viedma.
Así, al equipo de especialistas conformado por los doctores Fabricio Olego, Pablo Douin, Carlos Espósito, Carlos Fernández, Guillermo Molina, Fabián Alberto Mónaco y Fabián Randazzo, se suma esta nueva tecnología para posicionar al Servicio de Traumatología de la Clínica Viedma como uno de los mejores del país.